Cuando tres son multitud (reseñas de juegos para dos)

Si sólo hubiera tres juegos.  Este es el título de la primera sección (tras las presentaciones y explicaciones debidas) del muy estupendo libro “El mundo en juegos”, de Oriol Comas.  En esta sección se nos habla de los tres juegos que, muy probablemente, podrían ser identificados como los juegos más importantes de la humanidad: Go, juegos de Mancala y juegos de Ajedrez.  Los tres son muy antiguos, y están fuertemente arraigados en tres importantes culturas: oriental, occidental y africana.  Son juegos de enorme profundidad, reglas relativamente sencillas, y estudiados hasta la saciedad.  Y jugados por una enorme cantidad de personas en todo el mundo.  Y curiosamente, los tres son juegos para sólo dos jugadores.

Pareciera que desde siempre ha sido complicado unir en una mesa a varias personas a la vez para pasar un buen rato, y ya desde antiguo se buscaran entretenimientos para dos.  ¿Nos suena?  Sí, desde luego.  ¿Cuántas veces resulta imposible juntar al grupo por los dichosos quehaceres diarios?  Maldita colada, maldito trabajo, maldito fútbol…  Total, que aquí estamos tú y yo, los únicos con ganas de jugar.  Pues por suerte, no sólo hay tres juegos, ni tres docenas.  ¡Hay montones!   En esta sección, que nace, como casi todo, con la intención de quedarse, pasaremos revista a algunos de estos juegos, en ocasiones con reseñas “en profundidad”, en ocasiones con comentarios breves con primeras impresiones.  Cualquier cosa que ofrezca información para poder decidir cuando sólo estás tú y el otro.  Porque no siempre el otro es tu pareja…

Como primer plato, en breve presentaremos una pequeña joyita del que, por si fuera poco, ¡me gusta hasta la caja!  Nos pondremos el turbante, y la liaremos con camellos en el delicioso Jaipur de Sebastien Pauchon.  El mismo que hizo el delicioso Metropolys.  Este hombre es para comérselo, oiga.

Hasta pronto.  Mientras tanto, jugad, a dos o en multitud.

Francisco Javier Santos