The Resistance: Hostile Intent y The Resistance: Hidden Agenda
Autor: Don Eskridge
Editorial: Indie Boards & Cards
Nº Jugadores: 5-10
Duración: 30 minutos
Edad: 13 años en adelante
Para la editorial Indie Boards & Cards The Resistance (publicado en castellano como La resistencia por Homoludicus) supuso un paso adelante definitivo en su trayectoria reciente llegando incluso a publicar una reimplementación del juego con una ambientación diferente bajo el título The Resistance: Avalon.
Hace apenas unos días la editorial daba comienzo a una campaña en Kickstarter para financiar a la vez dos expansiones para este juego de identidades ocultas creadas por Don Eskridge (creador del juego original), cada una de ellas con tres módulos independientes diferentes con el nombre de The Resistance: Hostile Intent y The Resistance: Hidden Agenda.
En The Resistance: Hostile Intent se incluyen:
- Hunter: La batalla entre la resistencia y el imperio se ha recrudecido y ya no es suficiente con tener instalaciones como objetivos y ahora los objetivos son personales. Cen este módulo ambas facciones deben identificar a un personaje concreto del bando oponente para poder ganar.
- Reverser: Los Reversers tienen la habilidad de cambiar los resultados de una misión de modo que, en manos de la resistencia, pueden hacer que una misión fallida se convierta en un éxito.
- Inquisitor: Este personaje, que ya había sido incluido en The Resistance: Avalon, puede conocer la afiliación de otro jugador siendo la mejor forma de dar vida a las partidas.
Por su parte, en The Resistance: Hidden Agenda se incluyen:
- Assassin: Este módulo incluye todos los roles incluidos en The Resistance: Avalon que han sido renombrados para encajar en el mundo the The Resistance.
- Defector: Estos personajes pueden cambiar de afiliación durante la partida o conocerse entre sí, provocando que las acusaciones ocurran desde el comienzo de la partida.
- Trapper: Cada equipo de misión propuesto incluirá un personaje extra que no entrará en la misión sino que será aislado para ver sus movimiento. Este espía nunca sabe si el solo hecho de desvelar su identidad puede provocar el fallo de la misión.